Comercialización y Mercados
El comprador se servía del tacto y acanalado con un trozo de caña para percibir mejor su textura granulenta refulgente con tonalidades diversas al sol de otoño. En el primer tercio de siglo XX surgen los primeros comerciantes, exportadores, que compraban la materia prima para su posterior molienda, o el producto ya terminado de la mano de los agricultores, creando un clima de oligopolio y por lo tanto sin rentabilidad para el agricultor que se veía obligado a ceder sus frutos a dichos comerciantes a los precios que ellos decidían, si antes no habían sido capaces de vender sus pimientos en el mercado libre. Al principio, los pioneros de lo que es hoy el Gremio de Exportadores de Pimentón de La Vera adquirían el pimiento en rama en competencia con los comerciantes callejeros, que seguían comprando a los agricultores el pimentón previamente molido por su cuenta. Pasado el tiempo, desaparecieron estos comerciantes de pimentón, vendiendo el cultivador toda su producción en cáscara al fabricante exportador que realiza la molienda, la mezcla, el envasado y etiquetado (marca registrada) Se organiza una cadena de distribución y venta que consolida el mercado, ya de manera estable, dentro y fuera de España. El consumo y destino, por lo que respecta a la comercialización del producto, se puede agrupar en dos grandes áreas de consumo: el familiar o la restauración, orientado a la utilización culinaria del ama de casa y al restaurante, especialmente la variedad dulce envasada en pequeños formatos de latas y bolsas, y el chacinero, orientado a la elaboración de embutidos, como chorizos rojos, cintas de lomo, lomos embuchados, morcillas, longanizas, sobrasadas, etc. contribuyendo en su conservación; también se emplea en los adobos, bien sea de productos del cerdo, costillas, carne destinada a la cecina y en algunas regiones para cubrir los jamones y otros productos cárnicos. Para ello se utilizan las especialidades de dulce, agridulce u ocal y picante, según las regiones. En cuanto a su exportación, aunque una gran parte del pimentón se consume en el mercado nacional, en la actualidad se está consolidando la corriente exportadora a países de la Europa Central y el Continente Americano, en base a las características organolépticas del pimentón. La exportación del pimentón extremeño es inferior a la que se realiza en Murcia o en el Sureste en general. Su introducción, no obstante, con un pimentón diferente y avalado por la etiqueta de Denominación de Origen, ha comenzado a expandirse lentamente a países europeos y americanos. Los precios varían, como es obvio, según las épocas, las regiones y las circunstancias, lo cual es curioso en algunas ocasiones. Por ejemplo, en 1850 el precio del pimiento verato fue de 2,15 ptas/kg., y en 1901, incomprensiblemente, el precio fue de 0,75 ptas/kg. (en este mismo año el despezonado se pagó a razón de real y medio la arroba). En la campaña de 1997 el pimiento para pimentón en rama se pagó a 380 ptas/kg., de media, y el precio de venta al público de pimentón con Denominación de Calidad el año 1997, fue de 600 ptas/kg.
La producción actual de "Pimentón de la Vera" oscila entre las 1.800 y 2.000 toneladas por campaña. El 65% de la producción está acogida a la Denominación de Origen "Pimentón de la Vera". Los envases del pimentón, de cara al mercado, hoy día en La Vera, y de forma generalizada, son los siguientes: en sacos de rafia (50, 25, 15, 10 y 5 kgs.); en latas de 1/8, 1/4, 1, 2, 3, 6 y 12 kgs.; en bolsas de plástico o de aluminio de 1/4, 1/2 y 1 kgs.; y en botes de plástico de 100 grs